LaLiga 1|2|3
2016/2017
19ª jornada (18/12/16)
VICTORIA DE REBOTE
La victoria la pasada jornada ante el Oviedo calmó
las turbias aguas del rio Ebro a su paso por Zaragoza. Pese a esto, las aguas
seguían revueltas en el seno de la entidad blanquilla, ubicada en tierra de
nadie en la tabla clasificatoria. Agné viajaba con su plantilla a Vallecas para
tratar de terminar el año con victoria, la primera fuera de la actual campaña y
tras ocho meses, y poder ofrecer a los seguidores blanquillos tres puntos como
regalo de Navidad. Para tratar de asaltar el feudo rayista, el técnico de
Mequinenza siguió buscando dar con el once más fiable e introdujo las
siguientes novedades (4-4-2 de dibujo táctico): Isaac ocupó el carril derecho,
relegando a Bagnack a la banqueta; Cani y Xiscu se situaron en los extremos; y
arriba, junto con Angel, Dongou.
Una vez comenzó el encuentro, los
planteamientos iniciales de ambos equipos plasmados sobre el papel cobraron vida
en el césped. Los locales comenzaron entregando el balón a los aragoneses con
una intención clara: en cuanto robaran el esférico debían atacar por la banda
izquierda de Isaac. Los visitantes, por su parte, buscaban crear peligro
mediante las acciones de sus arietes, Dongou y Angel, pero no acaban de
entenderse entre sí. Entre numerosos fallos de ambos equipos y entre bostezos
de la afición que se dio cita en el estadio de Vallecas, se consumía la primera
parte. Afortunadamente para el espectáculo, llegó el descanso y el soporífero encuentro
dio un respiro de quince minutos.
El paso por las casetas no modificó la
intención ofensiva de los madrileños, quienes buscaban el peligro por la banda
izquierda, ni la sensación irregular que transmitían los aragoneses pero que le
bastaban para seguir en el encuentro. De pronto, los astros se alinearon con el
Real Zaragoza. El veterano ariete Javi Guerra se plantó dentro del área y, tras
conseguir regatear al guardameta zaragocista, envió la pelota de manera
incomprensible al lateral de la red. Cuando el Rayo parecía despertar, los
visitantes pudieron adelantarse en el marcador si no llega a ser porque el colegiado
señaló un más que dudoso fuera de juego a Dongou. Si bien el Rayo no llegaba con
excesivo peligro al área zaragocista, el conjunto aragonés sobrevivía gracias a
la solidez defensiva de la pareja de centrales formada por los uruguayos Cabrera
y Marcelo Silva. Javi Ros, desaparecido tras un mal encuentro, fue sustituido
por Erik Morán. Poco después, Isaac se vio obligado a abandonar en camilla el
terreno de juego y fue sustituido por Bagnack. Cuando el partido entraba en sus
últimos minutos de vida, los zaragocistas recibieron un regalo de Navidad
adelantado. Y es que si por algo conocen al Real Zaragoza fuera de nuestra
tierra es por marcar goles sorprendentes. Habitualmente sorprenden por su bella
factura o por su importancia, pero esta vez todo lo contrario (estéticamente). La
zaga local, ante la presión de Dongou, retrasó el esférico a su guardameta.
Hasta aquí podría ser una jugada habitual de cualquier partido. Pero, a la hora
de patear la pelota, el portero le pegó al aire y el esférico acabó por entrar
en la portería local suponiendo el primer gol del encuentro y adelantando a los
maños en el marcador. Buñuel, si creías haber visto todo el surrealismo, te
faltó por ver este Real Zaragoza.
De pronto, el Real Zaragoza recibió un regalo
de Navidad por parte de su rival. Y, cuando todavía estaba desenvolviendo el
primer paquete, se encontró con un segundo regalo. Esta vez, el árbitro señaló
un discutible penalti sobre Xiscu (bien en la primera mitad y desaparecido en
el segundo acto) tras un perfecto cambio de banda de José Enrique. Ángel no se
arrugó y materializó la pena máxima subiendo el 0-2 al marcador y anotando el décimo
tanto en su cuenta particular.
No merecía ganar el conjunto aragonés. Tampoco
perder. Pero, al final, quien se lleva el gato al agua es quien menos errores
comete. En este sentido, el Real Zaragoza había cometido errores, si. Pero, a
diferencia de los aragoneses, los locales no supieron aprovechar los fallos del
rival y esto les acabó pasando factura en el luminoso. Precisamente un error
defensivo de Marcelo Silva (correcto hasta ese momento) permitió al conjunto
vallecano anotar el “gol del honor” mediante Javi Guerra, quién materializó la
pena máxima cometida por el central uruguayo.
No dio tiempo para más y el Real Zaragoza
termina el año con una victoria “de rebote” pero que vale tres puntos como
cualquier otra. Las decisiones arbitrales han perjudicado más que favorecido al
conjunto maño a lo largo de la campaña. Por una vez que el escaso nivel del
estamento arbitral juega a favor, no nos vamos a quejar. Todavía tendrían que
favorecer mucho más al Real Zaragoza si quiere devolver lo que nos han robado.
Dicho esto, no queremos que nos den. Simplemente que nos respeten.
Con el parón navideño y la llegada del
mercado invernal, Juliá deberá encontrar varios refuerzos que permitan aumentar
las prestaciones del equipo. De todas formas, mucho mejor acabar el año con el
sabor de una victoria. Primer partido del 2017 ante el Girona en La Romareda.
Felices fiestas y feliz año nuevo para todos
los zaragocistas.
Ficha técnica:
- Rayo Vallecano: Gazzaniga; Quini, Dorado, Zé
Castro, Fran; Aguirre, Trashorras; Embarba (Manucho, 78), Alex Moreno; Miku
(Piti, 74) y Javi Guerra.
- Real Zaragoza: Irureta; Isaac (Bagnack, 69),
Marcelo Silva, Cabrera, José Enrique; Zapater, Javi Ros (Morán, 64); Xiscu,
Cani; Dongou (Lanzarote, 74) y Ángel.
Goles: 0-1, Álex Moreno, en propia puerta
(min. 74); 0-2, Ángel, de penalti (min. 84); 1-2, Javi Guerra, de penalti (min.
90).
Árbitro: Francisco Manuel Arias López, del
comité territorial cántabro. Por parte del Rayo Vallecano amonestó a Gazzaniga
(min. 85). Por parte de los aragoneses amonestó a Erik Morán (min. 90) y expulsó
a Marcelo Silva por doble amarilla (min. 70 y 90).